Una pelirroja garabateada, Madi Collins, fue detenida en una tienda al por menor para robar en una comercialización.El guardia de seguridad, sin embargo, estaba más interesado en satisfacer sus deseos sexuales que en castigarla por su crimen.Madi, siendo una seductora hábil, aprovechó para negociar una sentencia más ligera.Decidió complacer al guardia con un striptease tentador, dejando ver su marco pequeño y sus pequeños pechos.Una vez que se había expuesto completamente, procedió a hacerle una apasionada mamada al guardia, dejándolo completamente embestido.Al probar su dulce boca, se dio cuenta de que esta zorrita pequeña valía más que una simple advertencia.Le permitió continuar con su robo, pero a cambio de un revolcón salvaje.Madi , ansiosa por satisfacer los deseos de los guardias, acató con ansía.Después de su encuentro caliente, el guardia la soltó, permitiendo que siguiera sus actividades criminales.