Después de un largo día de trabajo, me estaba relajando en mi sofá cuando mi suegro llamó a la puerta.Me sorprendió verlo, pero tenía una mirada seria en su rostro.Había venido a hablar de algo importante, pero apenas estábamos a solas, comenzó a tocarme de una manera que me hizo sentir sucia y excitada.Sus manos estaban sobre mí, y luego comenzó a besarme con fuerza.Podía sentir su gran verga creciendo contra mi cuerpo.Me llevó a la iglesia donde procedió a follarme duro y profundo en cada posición imaginable.De atrás a mamárselo, no me mostró piedad.Su tamaño y fuerza eran abrumadores, pero no pude ayudarme.Estaba completamente bajo su control, y me encantaba cada segundo de ello.Al final, él se corrió en toda mi cara, dejándome completamente satisfecho y agotado.
