Llevaba bastante tiempo intentando convencer a mi pareja de hacer un trío con su amiga.Finalmente, logré persuadirla, y el resultado fue nada menos que alucinante.Las dos mujeres estaban más que ansiosas por complacerme, y no dudaron en demostrarlo.La belleza morena, con sus naturales y grandes tetas, bajó de rodillas y se metió mi verga en su boca, mientras su amiga se unía, dándome una garganta profunda que me dejó sin aliento.La vista de estas dos mujeres, con sus lenguas trabajando en perfecta armonía, era un espectáculo para contemplar.La dominación era intensa, y el placer lo estaba aún más.La belleza colombiana, con su apetito insaciable, se aseguró de tomar cada centímetro de mi verga palpitante, sin dejar parte intacta.El trío fue un viaje salvaje, un blowbang que me dejó completamente satisfecho.Fue una noche a recordar, una noche de puro y sin adulterar placer.