Una celebración familiar anual desde un punto de vista diferente está representada por la secuencia de Navidad cuando una joven le pide a su padrastro que la ayude en la cocina. Él logra montar una escena sucia y, por lo tanto, realiza su versión hardcore de baile. Muestra todas las señales y letreros claramente, la cámara está pegada a este incesto familiar tabú.