Megan es otra belleza ardiente de la República Checa y no es tímida al admitir que quiere actuar en películas para adultos. Saca su actitud lujuriosa y baila lo mejor que puede, una actuación que no solo sorprende a la audiencia, sino que también pone al director entrevistador en trance. Mírala excitarlo, crear el vapor y llevarlo con ella para una experiencia sexual imprudente.