En un juego retorcido de venganza, busqué consuelo en los brazos de la esposa de mi amigo, después de descubrir su traición con mi cónyuge.El pensamiento de ella de ser íntima con mi esposo encendió un deseo ardiente dentro de mí.Al entrar a casa a sus amigas, fui saludada por esta rubia bomba, sus voluptuosas curvas y el atractivo encanto imposible de resistir.Al ascender las escaleras, comenzó la seducción, sus hábiles manos me placeraban expertamente.El dormitorio se convirtió en nuestro parque de juegos, donde ella ansiosamente me llevó, su bonito rostro adornado con mi hombría.La pasión se fue intensificando cuando asumió el desde atrás posición, su gran culo tentándome más.El clímax de nuestro prohibido intento la vio de rodillas, recibiendo mi liberación en su boca, un testimonio de nuestro secreto compartido.Esto fue solo el comienzo de nuestra revancha, un baile de vengancia entre cónyums, donde cada toque, cada gemido, cada clímax fue un paso hacia la retribución.