Mujer asiática va a recibir un masaje, pero obtiene más de lo esperado en esta clásica broma de cámara oculta. Cuando se inclina, ese es el momento en que su masajista muestra la emoción de tenerla como clienta. Ella amablemente acepta hacerle sexo oral aunque se ve bastante incómoda mientras lo hace y él graba la acción.