Es el día de la gran celebración y el joven hermanastro está en su habitación, tratando de centrarse en sus estudios.Pero su mente sigue deambulando hacia su hermanastra, que está a pocas puertas abajo, preparándose para la fiesta.No puede evitar pensar en su culo apretado, rebotante y sus tetas perfectamente redondas.De repente, entra, llevando nada más que un conjunto de lencería de conejita diminuta.Ha estado viendo la televisión y escuchando música, tratando de entrar en el estado de ánimo de la fiesta.La vista de ella con ese atuendo es demasiado para que la maneje y rápidamente la tira a la cama.Le baja la cremallera del pantalón y ella toma ansiosamente su polla en su boca, dándole una mamada profunda y apasionada.Luego, ella abre sus piernas y él hunde su polla dura en su coño apretado follándola tan fuerte como puede.Este es un encuentro tabú que ambos han estado deseando durante mucho tiempo.