La madura traviesa Ashley, a quien no le importaría ser corregida sobre cómo servir bien a su amo, chupa tan bien al experto en BDSM Frank Gun que él corrige su actuación. Luego hay escenas donde ella es atada, azotada y provocada, como resultado de lo cual el Dominante le proporciona todo lo que pide después de un entrenamiento riguroso.