Dos hermanastras, morenas atractivas que están buenísimas y que parecen que nunca han recibido nada más grande que una mariposa de raíz, se despiertan su lado sucio y se van a la ciudad con los coños de la otra. Sus deseos egoístas hacen que un hombre alto y moreno entre para seguir satisfaciendo sus necesidades sexuales y AÑADIENDO más picante a su mezcla racial.