En una pequeña tienda, Isla Biza es atrapada robando con las manos en la masa. El oficial de policía la atrapa, la esposa y la arrastra al recinto. Solitos en la oficina, el policía sucio no puede resistirse a su figura seductora.La desnuda, dejando ver sus curvas seductoras.Su lujuria se apodera, y la deslumbra ahí mismo, en su escritorio.La adolescente mullida no puede evitar disfrutar del encuentro, alimentando el deseo de los oficiales.Se involucran en un revolcón salvaje y apasionado, ajeno al mundo exterior.Los oficiales sucios hechos quedan expuestos cuando son interrumpidos.Pero el daño se hace, y los bienes robados, junto con su secreto, permanecen encerrados en esa oficina para siempre.