Callie Jacobs, una típica chica adolescente americana, se encontró en un punto apretado cuando la pillaron robando en una tienda local en un tienda in fraganti.El guardia de seguridad del comercio la confrontó, y las cosas dieron un giro inesperado cuando le ofreció un trato.A cambio de evitar problemas legales, Callie tendría que someterse a sus demandas.Insegurada de qué hacer, la jovencita asintió, sintiendo la presión de la situación.El guardia la llevó a la trastienda, donde comenzó a desnudarla, dejando ver sus tetas firmes y su figura inocente.Le dijo que se ponga de rodillas, y como ella dudaba, le hizo un firme recordatorio de las consecuencias.Abrumada por el miedo y la excitación, Callie obedeció, tomando en su tamaño y preparándose.El guardia luego procedió a follársela, disfrutando de la vista de la adolescente desnuda ante él.El encuentro de Callie sintiéndose violada y satisfecha, una mezcla de emociones que nunca antes había experimentado.
