El hombre de este vídeo está claramente inspirado en la práctica espiritual del Tantra, que enfatiza la conexión entre el cuerpo y la mente.Comienza acariciando lentamente su mano hacia arriba y hacia abajo de su eje, tomándose su tiempo para saborear la sensación.A medida que se excita más, comienza a usar sus dedos para estimularse, explorando su cuerpo de una manera que es íntima y sensual.La forma en que mueve su mano y sus dedos es casi como un baile, lenta y deliberada, su respiración se vuelve cada vez más profunda y uniforme.Está claro que está disfrutando de cada momento de su sesión en solitario, y la cámara captura cada detalle de su cuerpo y rostro al llegar al borde del orgasmo.Este vídeo es un hermoso ejemplo de cómo la práctica del taoísmo se puede aplicar al placer, y cómo la mente y el cuerpo se pueden unir en un estado de felicidad.
