El video presenta a una joven inocente que confiesa sus deseos sexuales a su sacerdote de grandes tetas. El escenario es una iglesia, agregando un elemento de tabú a la situación ya arriesgada. La mujer está vestida con un atuendo lindo, que contrasta con la tradicional ropa de iglesia usada por el sacerdote. La conversación comienza con la mujer preguntando al sacerdote si alguna vez consideraría tener sexo con ella, y el sacerdote responde con un rotundo sí. La mujer luego procede a darle al sacerdote una mamada, que él disfruta enormemente. El sacerdote luego devuelve el favor, dándole a la mujer una paja mientras está de rodillas frente a ella. La actitud inocente de la mujer se rompe mientras gime de placer, revelando sus verdaderos deseos. El video es una combinación de elementos animados y cómicos, agregando un toque único al contenido típico.